viernes, 6 de marzo de 2009

The first Witch


En el cielo inmenso, un día cualquiera, en un lugar sin un nombre específico, se avistó un destello verde que cruzó la bella oscuridad nocturna, anunciando así un nacimiento. Pero no un nacimiento cualquiera, sino un primer nacimiento.

Nos remontamos a tiempos antiguos, donde la magia fluía en el aire y las ninfas surcaban los embravecidos rios. Pues hoy en día las creencias de estas historias están generalmente muertas, aunque alla algunas que sigan latiendo en algunos corazones.

Nos encontramos en una especie de refugio en medio de un bosque, cuya vegetación es tan densa que el paso se dificulta terriblemente, y las espesas ramas de los árboles no permiten que la luna llena ilumine nada en absoluto con su luz divina.

El lugar donde ocurrió se asemeja a un establo; es suelo, cubierto por una paja mas bien roñosa y medio marron, las paredes, de roca pura y piedras mohosas a causa de la humedad hacían que el sitio fuese uno de los lugares mas incómodos y fríos en los que llevar a cabo un parto, y más aun un parto como ese.

Liann estaba agotada, llevaba un vestido ancho y blanco, ahora gris debido al ambiente en el que solía desenvolverse. Tenía el pelo revuelto, descuidado y enredado, había sido un parto dificil y había sentido un dolor inimaginable. Pero junto con su amado Erl(un mago de alto calibre, siempre bien vestido, con diferentes túnicas para cada día, ese día lucía una morada muerta realmente bonita, con su sombrero a juego terminado en punta y su barba recién arreglada) se había fijado en aquella mujer la vez que le vió en el mercado robando una calabaza para poder tener algo que llevarse a la boca. Juntos, consiguieron sacar adelante a su preciado bebé.

La piel de la criatura era suave como la mas fina seda, y lucía un color blanco pálido con cierto roce grisáceo, pero aun así, de increíble belleza. Una tez jamás vista, y comparable con los envidiados tonos de la mismísima luna.
Por eso le llamaron: Lunnaen, hija de la luna.

No había otra como ella en ningun lugar, no se podía esperar una maga de alto rango teniendo una madre que no tenía donde caerse muerta, pero tampoco un humano cualquiera teniendo uno de los mejores magos de la comarca como padre.

Así pues, nació la primera bruja en el mundo.

1 comentario:

Rafa =) dijo...

ay, yo escribi uno con el mismo titulo =)

que union mas rara, la del mago y la chica, no?
como es una tunica morada muerta?

(devido es un sacrilegio, debido, por favor ;p)